
El bolero suena mejor en piano, y tu espalda se siente mucho mejor con solo tres segundos de mis dedos y mis manos, ¿recuerdas?, el tiempo no es para cualquiera, la noche no es para todos, los agujeros de mi cielo no le toca a todo el mundo. Es el color rojizo de tus ojos, los que forman mi eclipse anormal, mi escalera circular que me extravía cada vez que escucho tu voz, es el mundo cercano y el tiempo lejano lo que me ahuyenta de ti, lo que me dice que soy una ficha marcada, una carta teñida de mal jugador.
Ese no es el color de tu cabello y no me importa, de noche la luz amarilla y electrificada de la ciudad te vuelve más bella, más lejana y extraña. Maldita sean las reglas que me separan de ti, los momentos que ayer viví, hoy me están cobrando muy caro, las travesuras se han convertido en fatalidades que hoy me hacen que huya, y que piense mas en el color sangre de tus ojos.
El bolero suena mejor con guitarra, pero detrás de tus orejas caben mejor mis labios ¿recuerdas? Odio las llamadas que no son tuyas, y que debo contestar, no se dar explicaciones y me las piden, no se explicar ni como llegue a ser lo que no soy, y me preguntan que soy. Déjenme que me decida alguna vez por lo mas difícil, no quiero a mi madre a mi costado, no quiero encontrarte cuando estoy llegando, siento como si Bob dylan me ha compuesto una canción y no se como interpretarla.
Todos sabrán por que, pero nadie sabrá por quien, ni con quien, pero la ultima escena de mi peor historia llega al principio de su final, tus ojos color de los celos, el color falso de tu cabello, el reloj en espiral esta corriendo y aun no se si vendrás conmigo. No se si extrañarte tanto te asuste, te espante, te haga llorar.
Mi hijo juega con los granos de maíz descalzo sobre el piso encerado que refleja nuestro vínculo irrompible de padre e hijo, acaricia su guitarra blanca y me imita tratando de cantar una canción, soy el hombre araña de sus sueños, el del trencillo rojo que le falta un pedazo de su camino circular.
Son las dos únicas gotas de mi sangre, tan separadas entre si y tan unidos por mi, los que me hacen pensar que esos ojos del color del caoba están lejanos cada vez mas. Es la estrella fugaz mas visible si solo nosotros la vemos, y deja de ser fugaz, porque la tenemos en nuestras manos, por que es el secreto peor guardado entre nosotros, las hojas en blanco deben aparecer ya, o de lo contrario tendré que desaparecer.
Un bolero suena mejor con un piano enorme, una mujer con los ojos del color de los celos rojo caoba y la falsa apariencia de tu cabello...